Iglesia católica en Guerrero en contra del aborto voluntario, es un homicidio
16 enero, 2022Acapulco, Gro; 16 enero de 2022.-(CA).- La iglesia católica en Guerrero en contra del aborto voluntario por ser un homicidio, invitó a los legisladores y a toda persona a hacer conciencia ante la modificación del código penal presentada por el Congreso Local.
A través de un comunicado oficial firmados por los prelados católicos en el Mensaje a la Provincia de Acapulco con motivo de la XXXI asamblea Pastoral Provincial, expresaron que “ninguna persona, grupo, institución social o política puede justificar o exigir como derecho o llevar a cabo la muerte de otro ser humano desde su concepción hasta su muerte natural”.
Levantaron la voz, no sólo porque somos creyentes, sino porque es un derecho humano fundamental. No olvidemos que ‘el aborto voluntario es un homicidio’ (Papa Francisco. Audiencia General 15/septiembre/ 2021). La levantamos también a favor de todas las mujeres para que tengan acceso a una protección y promoción integral.
El documento esta firmado por Leopoldo González González; Arzobispo de Acapulco, Salvador Rangel Mendoza Obispo de Chilpancingo- Chilapa, Dagoberto Sosa Arriaga; Obispo de Tlapa y Joel Ocampo Gorostieta;Obispo de Ciudad Altamirano.
“Lamentamos profundamente que frente a la aparente disyuntiva sobre no criminalizar a la mujer que aborta y preservar la vida del concebido no nacido, se pretenda descartar al segundo, sin buscar la salvaguarda de ambos”.
Sin duda es más difícil garantizar la protección de la mujer y que se respete el derecho a la vida tanto de la madre como del hombre o la mujer recién concebidos y todavía no nacidos, como un día fuimos Usted y yo. Es más difícil, pero es lo que hay que buscar.
El artículo primero de nuestra Constitución, al garantizar la igualdad de todo individuo, expresamente prohíbe cualquier discriminación motivada por la edad. La ley y la autoridad tienen como tarea proteger los derechos de todos, y en especial de quienes menos pueden defenderse, y el más fundamental es el derecho a la vida, reconocido por nuestra Constitución.
Los católicos señalan que a todos nos resulta claro que nadie puede ser asesinado por no tener unas semanas más de vida, por no tener unos meses más de vida, además cuestionan la existencia del ser humano desde el momento en que es concebido, lo consideran como un organismo humano que se desarrollará hasta su etapa madura, a no ser que la enfermedad o la violencia se lo impidan.
Explican que el aborto no consiste en interrumpir un embarazo. Es matar al ser humano que se desarrolla en el seno de su madre. Si juzgamos que no ha de defenderse la vida de ese ser humano, porque es todavía muy pequeño, difícilmente puede defenderse derecho humano alguno. Si por pequeño se le puede quitar la vida a alguien, entonces es la ley del más fuerte la que impera, no el derecho y la justicia.
Si los hombres y mujeres que actualmente formamos la humanidad no hubiéramos sido respetados y acogidos desde la concepción, simplemente no viviríamos. Aquel que éramos cuando cigotos, cuando embriones, ese mismo somos ahora.
Para cuidar de la mujer y del hombre recién concebidos, hemos de cuidar de su madre: que pueda contar con los cuidados necesarios de salud y de asistencia social para dar a luz al niño que lleva en sus entrañas, acompañada de su esposo y apoyada por sus otros hijos. Si fue víctima de violación, el delito es muy grave y no ha de quedar impune.
Parte de la sentencia habrá de ser el cuidado de la mujer y de la criatura. Si fue otra la ocasión del embarazo, “el varón es corresponsable en la obligación de dar un acompañamiento afectivo y efectivo a la mujer que ha embarazado y a su hijo”. Esto ha de quedar garantizado por la ley y la impunidad nada ayuda al cuidado de la madre y de su hijo.