Más de 30 familias acceden a obtener agua legalmente en Acapulco
9 julio, 2020*Más de 30 familias de la colonia PRI-Coloso, ya cuentan con contrato y pagan por el servicio que reciben en sus tomas domiciliarias
Acapulco, Gro., 09 de julio de 2020.- Más de 30 familias de la colonia PRI-Coloso, quitaron sus mangueras que conectaron clandestinamente a los tanques de almacenamiento de agua potable, sumándose al combate del “huachicoleo” del líquido vital en Acapulco.
Los vecinos de esta colonia popular se suman así a las acciones que impulsa el gobierno de la alcaldesa, Adela Román Ocampo, para abatir uno de los tantos problemas de hace muchos años y que merma la productividad de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (Capama).
A través del diálogo, la Capama inició el proceso de regularización de más de 30 familias, que antes extraían el agua de manera directa de los tanques de almacenamiento, afectando a usuarios con contrato, ya que amarraban a las mangueras clandestinas piedras o botes rellenados de tierra, taponando muchas veces las líneas de abasto generándose fugas e impidiendo que los contenedores lograran sus niveles óptimos.
Con su contrato pagado y una toma regularizada, las más de 30 familias hoy están conscientes de la importancia en el cuidado del agua y asumen su responsabilidad como usuarios para evitar su desperdicio, sumándose en el combate al “huachicoleo” del líquido vital, que hoy más que nunca debe llegar de manera equitativa a todos los acapulqueños.
Surisaddai Arellano Márquez, María Hernández Santiago y Bibiana Calvario Juárez, en sus testimonios como nuevas usuarias con contrato de la Capama, expresaron su beneplácito y reconocieron el trabajo de Adela Román Ocampo, por haber sido regularizadas luego de casi 30 años que su comunidad no era tomada en cuenta por las autoridades.
De esta forma el Ayuntamiento porteño deja constancia de la nueva mística de servicio en beneficio de los acapulqueños, para mejorar la operatividad de Capama en beneficio de los usuarios, erradicando las tomas clandestinas mediante el diálogo y la concientización ciudadana, ya que el agua es un derecho humano que todos debemos hacer valer responsablemente.